El Arval Mobility Observatory ha presentado su estudio "Radiografía de la movilidad sostenible en España", revelando un creciente interés ciudadano por la movilidad sostenible que contrasta con una limitada implementación empresarial.
La brecha entre conciencia y acción
Mientras el 82,4% de los ciudadanos considera importante la sostenibilidad en sus desplazamientos, solo el 18,2% percibe que sus empresas fomentan activamente estas prácticas. Esta disparidad resulta especialmente significativa considerando que casi la mitad de los encuestados considera esencial el impulso empresarial en este ámbito.
Conocimiento limitado del marco legal
A pesar de que el 45,4% de los ciudadanos ha oído hablar de la Ley de Movilidad Sostenible, únicamente el 14,6% comprende sus implicaciones prácticas. Este dato es particularmente relevante considerando que uno de cada cinco encuestados trabaja en empresas que estarían obligadas a implementar planes de movilidad sostenible.
Tendencias de cambio
Los hábitos de movilidad están evolucionando: cuatro de cada diez españoles han modificado sus patrones hacia opciones más sostenibles en los últimos cinco años. La proyección futura es aún más prometedora, con dos tercios de los encuestados planeando adoptar medidas sostenibles en el próximo quinquenio.
El futuro de la movilidad
El estudio revela una clara tendencia hacia la electrificación: el 69,4% de quienes planean adquirir un vehículo optaría por uno electrificado. Las preferencias se distribuyen entre tecnología híbrida HEV (37,4%), híbridos enchufables PHEV (16,8%) y eléctricos puros EV (15,2%).
Infraestructura y políticas públicas
Los ciudadanos identifican tres pilares fundamentales para impulsar la movilidad sostenible:
- Mejora del transporte público (66,8%)
- Ayudas para vehículos eléctricos (49,6%)
- Ampliación de infraestructuras como carriles bici y puntos de recarga (40%)
El reto de la concienciación
Existe un desconocimiento significativo sobre el impacto medioambiental del transporte. Mientras que este sector representa cerca del 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero en Europa, casi la mitad de los españoles subestima este impacto, situándolo entre el 10% y el 20%.
La transformación hacia una movilidad más sostenible requiere un esfuerzo conjunto de ciudadanos, empresas y administraciones públicas para superar la brecha entre intención y acción.