El actual estado de alarma, decretado debido a la emergencia sanitaria por el COVID-19 se extenderá, si no hay cambios, hasta el próximo sábado 11 de abril.
En este sentido, recordamos que todos los centros QUADIS se mantendrán cerrados durante el estado de alarma. Esta situación excepcional será restablecida en el momento que se levanten las restricciones.
Durante este periodo, y tal como explicábamos en un artículo anterior de QUADIS, la circulación se ve afectada de distintas maneras:
- Los desplazamientos en automóvil están prohibidos, salvo excepciones.
- Se suspenden los plazos de renovación de ITV y permiso de conducir.
- Como norma general, se puede estacionar en zonas de aparcamiento regulado, aunque no se disponga de autorización.
Además, desde esta misma semana, los desplazamientos quedan todavía más restringidos, ya que hasta el jueves 9 de abril solo podrán desplazarse para ir a trabajarlas aquellas personas cuyas actividades han sido decretadas como esenciales.
Como resultado de todas estas medidas, muchos vehículos están pasando periodos extraordinariamente largos sin ser usados. Este hecho, unido al de la variabilidad meteorológica propia del inicio de la primavera, hace muy recomendable que estos vehículos sigan recibiendo un mantenimiento preventivo. Repasamos los aspectos principales de este mantenimiento, junto a algunas recomendaciones, a continuación.
1) Realizar un mantenimiento preventivo del automóvil
Parece una obviedad, pero los vehículos han sido diseñados para circular. En este sentido, podemos paliar los efectos de la falta de uso mediante sencillas maniobras de mantenimiento:
- Arrancar el coche cada 10 días y circular con él durante 10 minutos: es recomendable poner en marcha el vehículo y realizar una vuelta corta por donde se pueda, aunque sea por dentro del parking. Hay que esperar a que la temperatura del motor llegue a 90°. Con esto se consigue que el motor se lubrique y que el resto de fluidos como el líquido de freno y el refrigerante circulen y así evitar que se estanquen y se echen a perder. Al circular, se evita que los neumáticos se deformen por el propio peso del vehículo y las articulaciones agradecerán moverse de vez en cuando. Además, al calentar el motor, se consigue que trabaje el filtro de partículas de escape. Con esto también se carga la batería y se conservará en mejores condiciones.
- Accionar los componentes eléctricos y electrónicos: cuando se lleven 10 minutos con el vehículo en marcha, hay que activar el aire acondicionado para que funcione y no acumule suciedad. Bajar y subir los elevalunas, mover los retrovisores y el resto de componentes eléctricos y electrónicos evitará que los pequeños motores que los accionan se queden bloqueados por la falta de uso.
- Aprovechar estas maniobras para comprobar líquidos, pudiendo así detectar posibles fugas.
- Comprobar la presión de los neumáticos, para detectar posibles fugas de aire.
- Desconectar la batería: en el supuesto de que no se puedan llevar a cabo los dos primeros consejos, se debe desconectar la batería. Con el coche parado también se consume la batería y este elemento es lo primero que podría fallar. Es conveniente desconectarla y tapar la carga positiva (indicada con un signo +) con un tapón o cinta aislante. Algunos vehículos tienen la opción de “modo reposo”. Si es el caso, habría que activarlo, y así conseguir alargar su vida si el vehículo va a estar parado.
2) Mantener el vehículo limpio y protegido de las inclemencias meteorológicas
Si el vehículo se encuentra estacionado en un lugar cubierto, una buena idea puede ser cubrirlo con una lona, para evitar que se acumule en él la suciedad.
Si, por el contrario, este se encuentra a la intemperie, es muy conveniente mantenerlo limpio y que el polvo o el polen no se acumulen en él. Es importante limpiar el vehículo por dentro y por fuera, ya que la suciedad que se deposita encima de la carrocería, sobre todo la resina de los árboles y los excrementos de animales, pueden generar óxido y provocar manchas que podrían ser permanentes. En el caso del interior del vehículo, tapicería, alfombrillas y el resto de elementos interiores pueden provocar malas olores al estar sucios.
También has que prestar atención a la limpieza de las gomas de las escobillas limpiaparabrisas, y es que las gomas en general se resecan al estar en el exterior y no tener uso, y las de los limpiaparabrisas no son una excepción. Se deben de limpiar con un trapo húmedo con jabón para evitar que acumulen suciedad.
En este sentido, se puede aprovechar el desplazamiento a una gasolinera o supermercado para acceder a un área de lavado que se mantenga en funcionamiento. Se puede complementar esta operación con la aplicación de un producto protector de la carrocería, tales como la cera, que evita que la suciedad afecte a la pintura y otras partes sensibles del vehículo.
3) Desinfección del interior del coche
Uno de los mayores retos que implica la emergencia sanitaria por el COVID-19 es la desinfección de los espacios interiores, con el objetivo de evitar la propagación del virus. Esto hace que también se recomiende una desinfección básica del habitáculo de coche.
Para ello, se debe evitar entrar en contacto con elementos del coche tras haber realizado compras en el supermercado o haber repostado gasolina. La mejor manera es el uso de guantes de látex desechables antes y después de entrar en el coche.
Además, también es recomendable limpiar aquellas superficies más susceptibles de entrar en contacto con los ocupantes: manetas, volante, cambio de marchas, cinturones de seguridad, asientos y sistema de navegación. Para ello deben utilizarse desinfectantes basados en amonio cuaternario, alcohol isopropílico o lejía diluida con agua, siempre vigilando que el producto no dañe los materiales del vehículo. También se reducirá el riesgo ventilando adecuadamente el vehículo tras su uso.
4) Recordar las restricciones y extremar las precauciones
Por último, es importante recalcar la importancia de extremar las precauciones cuando se circule durante el estado de alarma. Los desplazamientos solo se deben realizar cuando sea imprescindible, y siempre siguiendo las restricciones impuestas.
De la misma manera, conviene recordar que los talleres de mecánica solo ofrecen servicios mínimos y de urgencia, de manera que cualquier mantenimiento o reparación que pudiera necesitar el automóvil, se recomienda esperar a superar este estado excepcional para realizarlo.